30 de agosto, 2018 | Rossana Solorzano | Radio Tele
Francia prohibirá a partir del sábado cinco pesticidas neonicotinoides con el fin de hacer frente al declive de las colonias de abejas, si bien los expertos advierten que la medida será insuficiente. Los neonicotinoides son los insecticidas más usados del mundo. Se emplean en los cultivos de remolacha, trigo, colza, árboles frutales y viñedos, entre otros, para acabar con orugas, cochinillas, pulgones e insectos que carcomen la madera.
En Francia se usan principalmente de forma preventiva en las semillas, extendiéndose por toda la planta, incluido en el polen. Como todo insecticida, a ciertas dosis, los neonicotinoides matan a los insectos, incluidos las abejas.
La UE decidió en abril prohibir en los cultivos en campo el uso de tres neonicotinoides (clothianidin, thiamethoxam e imidacloprid), objetos de restricciones desde 2013. La medida, que permitirá el uso en invernadero, entrará en vigor completamente el 19 de diciembre.
Pero Francia va más lejos. La prohibición versará sobre el uso – incluso en invernadero – de las cinco sustancias hasta ahora autorizadas en Europa para fines fitosanitarios (las tres que serán prohibidas además del thiacloprid y acetamiprid).