Por su parte, el viceministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Riabkov, exhortó a Estados Unidos a reconocer que su política con respecto a Venezuela tiene una alternativa razonable, según la agencia rusa de noticias Sputnik.
“No nos hacemos ilusiones, pero creemos que los que están obsesionados con sanciones, amenazas, presión y chantaje -y no son pocos, sobre todo en América del Norte- también deben ver que existe una alternativa razonable y, probablemente, viable”, dijo Riabkov en rueda de prensa.
Respecto a la primera reunión del Grupo de Contacto Internacional sobre Venezuela, que se celebra en Montevideo, Riabkov expresó la esperanza de que haga “una seria aportación política, intelectual y creativa para ayudar a encontrar una solución real”.
Indicó que Rusia esperaba poder participar en el Grupo de Contacto Internacional sobre Venezuela, compuesto por países europeos y latinoamericanos, por lo menos en calidad de observador, pero “nos dijeron que no iba a haber este tipo de figura en la reunión”.
Expresó sin embargo la “preocupación” de Rusia acerca de la posibilidad de que la cita en Uruguay, más que para promover el diálogo entre la oposición y las “autoridades legítimas” de Venezuela, se utilice para “presionar” al presidente Nicolás Maduro y a su gobierno.
Advirtió de que una intervención externa en Venezuela, especialmente una armada, “sería el peor escenario posible y tendría consecuencias difíciles de predecir”.
“Está claro que el uso hipotético de la fuerza en esta situación conducirá a un baño de sangre y a consecuencias que se sentirían más allá de Venezuela”, indicó Riabkov, quien no descartó un intento en este sentido por parte de Estados Unidos.
Venezuela atraviesa una crisis política que se agravó el pasado 23 de enero, cuando el líder de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, se autoproclamó presidente encargado del país ante una multitud de simpatizantes demandando la salida de Maduro del poder.
Imagen RT